Olivos

Olivos. 

El olivo ha sido durante muchos años un cultivo típico de secano por su capacidad para resistir sequías prolongadas. Con los avances tecnológicos se ha demostrado que la producción del olivo aumenta considerablemente cuando recibe un aporte de agua complementaria a la que por naturaleza recibe solo de las precipitaciones, sobre todo en aquellas zonas donde la pluviometría es baja.

  • El olivar de regadío tiene elevada producción y nivel de intensificación alto.
  • El método recomendado es el riego por goteo.